jueves, 19 de febrero de 2009

Charla conmigo misma en una post-guardia

Sabes que así es querida Julliet, la vida corre fuera del hospital... no se detiene, no te espera. Aprendes a medir tu vida no en horas y dias, sino en guardias y bloques de 72 hrs, cada bloque independiente del otro como un ciclo inagotable... pero no importa, sientes que tu vida siempre hubiera sido así, pareciera que siempre sera así... no hay etapas, solo servicios... y aprendes a mimetizarte en el ambiente convirtiendote a final de cuentas en parte de el. Nada resulta pequeño dentro de ese lugar, cada paciente, cada conversación, cada nota se convierten en un nuevo protagonista a cada momento.

Un tanto deprimente quiza, pero no cambiarias ese camino por ningun otro, sabes que serias capaz de recorrerlo cien mil veces con tal de llegar al lugar que deseas llegar. Quizá la medicina tiene un tanto de masoquista y de romantica... te quejas por aquí y por allá, pero en el fondo no cambiarias nada, te gusta ser la mujer de caracter que sufre y sigue con la frente en alto, aquella que soporta 24 hrs sin dormir y hace una sutura estetica y funcional después de eso, aquella que dentro es una más, un escalon bajo en la cadena evolutiva, pero fuera es diferente al resto del mundo, pues sabes tambien aunque no quieras admitirlo que existen los "medicos y la gente"... tantas veces escuchas y dices "la gente piensa esto, la gente dice aquello" sin darte cuenta que inconsientemente los médicos nos sentimos una estirpe diferente que se mueve en el mundo sin ser parte de ella, en mayor o menor medida todos somos así, arrogantes, egolatras, genios incomprendios, pero a la vez nobles, altruistas, humildes y depresivos... disfrutas siendo así, siendo médico y llevandolo pegado al nombre.

lunes, 2 de febrero de 2009

MI PRIMER PARTO... QUE HORROR!!!

No me sentia preparada, no quería hacerlo, pero la MIP 2 que estaba de guardia conmigo es demasiado caprichosa y no le gustan los partos por que a palabras de ella le parecen demaciado sucios. En cuanto nos dijeron que había una múltigesta con 8 de dilatación dijo: Haganle como puedan, yo no lo voy a atender.


Todo quedaba entre mi compañero MIP I y yo, al parecer era yo quien tenía más nociones de como hacerlo, y trate de darme animos repitiendo algo que he escuchado muchas, muchas veces pero hasta ese día le di importancia: "En el monte las mujeres paren solas" y es que en momentos así te agarras de lo que sea para darte valor.

Me toco una enfermera de lo más insoportable, me veía con la cara perdida, mis manos agasapadas sobre mi misma, mis anteojos que no hallaban su lugar y desde un inicio, en vez de ayudarme a llenarme de seguridad se la paso tratandome como si fuera un ser superior y yo un bichito perdido bajo su zapato.

Entramos a la sala de expulsión, aunque el lugar me era familiar todo en ese momento me parecia extraño... y es que, el sistema del hospital no tiene razón de ser, no he rotado por ginecología, y ya pretenden que en las guardias me aviente al ruedo sin un médico que este ahi para decirme que hacer, y es que aunque ya me lo habia explicado un ginecologo la guardia anterior, aun tenia muchas dudas. Como sea, ya no era tiempo para dudar, estabamos ahí, la cabeza estaba ahí... la enfermera le explicaba no se que diablos a la paciente jugando a la ginecologa, y la interrumpi para empezar ya, el parto era inminente, la enfermera sumamente molesta me dijo: ¿No me interrumpas, no vez que estoy hablando?, yo no sabía que hacer, normalmente no soy nada dejada pero en esta ocasión mis ideas se encontraban, por un lado ella había estado en muchisimos partos y quiza aun faltaba tiempo y yo estaba exagerando, pero por otro era yo quien estaba viendo la cabeza distendiendo el perine y escuchaba a ese perine gritando "Infiltrame, infiltrame".
Cuando la enfermera termino su discurso y se digno a darme la lidocaina, le pedi a la paciente que no pujara, para infiltrarle y hacerle la episiotomía, acto seguido la enfermera se coloco junto al oido de la paciente y comenzo a gritar como vieja de mercado, ¡¡¡pujele señora, pujele!!!, yo insistia en que no pujara y la enfermera seguia gritando como cacatua en el oído de la paciente... la cabeza salio desgarrando el perine, aspire las secreciones del bebe y en ese momento me asalto la duda más angustiante de toda mi vida ¿¡¡Como diablos lo agarro?!!!, sacarlo no fue problema, el problema fue que hacer con el una vez fuera, no sabia como acomodarlo y por un segundo casi se me escapa de las manos, se lo pase a mi compañera que hiba a hacerla de pediatra (Esa noche no hubo ni ginecologo ni pediatra en todo el hospital), y al darselo casi olvido que tiene cordon úmbilical.

Finalmente repare el perine lo mejor que pude... pero a fin de cuentas como pude.

Gracias a Dios todo salio bien, pero las cosas no devieron ser así... no debi atender mi primer parto sin un ginecologo y un pediatra al lado, no debio de habermelo entorpecido todo la enfermera, y la MIP II no debiera ser tan egoista.

Como sea... algun día tenia que pasar, mal que bien, ya atendi mi primer parto, y estoy segura que el segundo sera mil veces mejor.

No quiero ser un mal interno

Desde hace 2 semanas hemos estado robandonos una guardia... debieramos ser 4 en mi guardia, pero siempre estamos 3, nos rolamos para escaparnos del hospital y cubrimos al que se fue.

Se que no es correcto pero nos ayuda a descansar un poco... mi mentalidad ha cambiado mucho del día que entre al día de hoy, al principio saltaba de la cama a la primera que la tan machacada frasecita "médico internoooo" se escuchaba en la puerta de mi cuarto, me quedaba bastantes horas de más, y sentia que tenía un gran, gran privilegio al estar en el hospital.

Al día de hoy, mis animos se han mengüado y creo que el hospital no te agradece nada... entre el: "El hospital seguiria funcionando sin ustedes", las enfermeras que solo ven que chisme nuevo te arman con algun Doctorsete acosador, en vez de ver como te esmeras por sacar el trabajo y las otras guardias que solo estan sobre la tuya, buscando el más minimo error para cacarearlo como gallinas y distraer la atención de lo ineptos que son (algunos), me estan convirtiendo en una quejumbrosa más.

Creo que si, el hospital funcionaria mejor sin nosotros POR QUE LOS MEDICOS DE BASE SE VERIAN OBLIGADOS A TRABAJAR.

Les contare lo del Doctorsete acosador... alguna vez mencione al Dr. Palacios (Que obviamente no se llama así) al principio parecia ser linda persona, me ponia a estudiar y me explicaba temas, era bastante agradable y yo estaba profesionalmente fascinada con el. A veces notaba muy triste al pobrecito, y me hablaba de lo duro que era vivir solo y estar divorciado, me decia que vivia con sus Papas, pero no se acostumbraba al estar solo sin una pareja... yo a pesar de mi corta edad tambien soy divorciada, y me sentia conmovida e identificada ante su tristeza. Me invitaba a salir muy frecuentemente, pero yo me negaba por que su edad me parecia un abismo.
El Doctor siempre veía la manera de tenerme en su oficina con alguna excusa... cada vez era más y más absorbente, en cuanto supe que nos estaban armando chismes decidi alejarme de el, al marcar distancia sus intentos fueron cada vez más desesperantes y patheticos. Llego al grado de invitarme a viajar ofreciendose a pagar todo e incinuar que nada me faltaría con el y hasta me regalaría un coche si aceptaba estar con el.

Gracias a Dios una de las enfermeras hablo conmigo y me dijo que no fuera a creer nada de lo que dijera ese Médico, que tenia menos de 1 año de haberse casado de nuevo y que ella sabia que estaban super bien juntos, que el es así, le encanta corretear a las internas y algunas han caído. Me hablo incluzo de una que ella misma vio besandole hace algunos años. Hable con el Doctor y le dije que como persona lo apreciaba mucho, como médico más, pero como hombre pintara una ralla y se mantuviera al margen. Desde entonces aunque sigo saludandole me mantengo lejos de el, despues de todo solo tiene un paciente.

En fin... voy a tratar de resetearme, me he dejado envolver del mal hambiente y voy volando a convertirme en un mal Interno. Necesito aprender a absorber lo bueno... como lo agradecidos que son algunos pacientes cuando haces un buen trabajo, la satisfacción propia que te da el saber que haz elegido bien un tratamiento, los buenos médicos, las buenas enfermeras, mi meta sera cada día lavarme la mala vibra y pintarme solo de lo bueno. El internado puede ser horrible, esclavizante y en ocasiones hasta inhumano... pero todos los Médicos han pasado y seguiran pasando por el, que me quede la satisfacción de haberlo hecho bien.